Y si después...

Aún recuerdo cuando compré mi coche, como pasa el tiempo. Recuerdo que todos los domingos pasaba por la estación de servicio para limpiarlo. Llantas brillantes, asientos impolutos, cristales de revista.
- Un dominguero.
Sí, la verdad es que si. Pero, decidí hacerlo así, porque no quería que terminase como el otro. Sucio la gran mayoría de veces. Con este no va a pasarme lo mismo, me decía. Pero pasó. Claro que pasó. Al final llega un domingo que te dices..."lo dejo para después." Pero ese después se demora y...
Mira, no soy muy de tecnologías la verdad. No necesito tener el último cacharro del mercado para sentirme feliz y exitoso. Vivo en modo sencillo. Lo cuento muchas veces, cuanto más vivo, menos necesito, y créeme, te digo de corazón que es cierto. Pero como todo, cuando la maquinita falla hay que remplazarla. Compré mi teléfono nuevo, Samsung, que siempre me han funcionado muy bien. Le compré el protector de pantalla para evitar rayones, la funda para resguardarlo de posibles golpes, ya sabes, lo de siempre. Hoy tengo el protector de pantalla para cambiar desde hace... lo dejo para después. Ya sabes.
- ¡¡¡Va venga, no empieces a enredarte!!!
- Que no, tu presta atención, después te cuento las razones. Pero ya sabes, después.
Hoy quiero compartir esto, porque en muy pocos días entraremos en un año nuevo. Con cada comienzo de año, hay cosas que cambian. En precio del tabaco, el precio de la gasolina, suben las huevos, el pan, la leche. Cambian los calendarios, las agendas, lógicamente nadie quiere trabajar con agendas de años pasados. Cambian las tarifas de la luz, del tren, del Prime y del Netflix.
Cambia todo. Todo...menos tu. Y me explico. Es momento de planificar el nuevo año. Es sencillo, si no hay planificación no hay éxito. Tenemos la opción de tener un gran año si sabemos lo que queremos hacer. Sé que estás arto/a de escucharlo, pero es una realidad. Si no planificas tu año y lo dejas a la improvisación " que sea lo que Dios quiera", al final será así, será lo que quieran otros, no lo que tu querías. ¿Me explico?
Si todo cambia, pero tu no lo haces, ¡¡¡el que termina quedando atrás eres tu!!! Esto es lo que tienes que entender. Y es una realidad. Vivir en automático, es consumir días, no vivir.
- ¿Pero como narices puede ser que entremos en un año nuevo y no sepamos que objetivos tenemos o que queremos conseguir? ¿De verdad lo vas a dejar a la improvisación? O peor, ¿lo vas a dejar para después?
¿Cuáles son tus metas? ¿Que razón hace que te levantes de la cama cada día? ¿Que motivación? No nos gusta escuchar esto, pero aquí, los que no tenemos metas (aún) decimos que nuestra motivación son nuestros hijos, ganarnos la vida para darles a ellos... Lo siento, mentira todo, dátelo una vuelta. Claro que vas a hacer todo eso y mucho más por ellos, pero también sabes que esa no es la respuesta.
Tengo un amigo, cada vez que veo su llamada siempre me digo, " le llamo después".
Tengo otra amiga, que siempre le digo de quedar a tomar un café, una caña... a ver si le llamo después también.
Lo importante es hacerlo ahora. Mira antes, como muchas personas más, me hacía mis objetivos de año nuevo. Bueno, yo creía que los hacía, pero nada de eso. Me contaba historias para no dormir. Este año voy a dejar de fumar, voy a bajar de peso, hacer deporte, aprender inglés, llamar más a mis padres o sacar más a pasear al perro. Como puedes imaginar... El primer día de enero, la dieta la empiezas genial. El día 3 ya vas a medio gas, el día 5 notas que vas a trompicones. Decides comenzar después del roscón. Mejor lo dejo para después.
Marcarte tus objetivos, es hacerlo bien, con fechas, con decisión e ir a por ello. Decirte que quieres hacer tal cosa, no es marcarse un objetivo, es hacer el KIKO. (Esto te lo explico después también)
Mira, soy muy joven, sabes que es la razón por la que intento no dar consejos. Cuento lo que vivo y como lo vivo, y te aconsejo que lo vivas tu mismo, no te creas nada sin probarlo.
- ¿Pero no dices que no aconsejas nada? ¿En que quedamos?
- ¡¡Buah chaval!!, no me pasáis una.
Solo te digo que lo que haces en el presente determina tu futuro. Y no lo digo yo, lo dice la vida. Y puede que si dejas el coche para lavarlo después, pues después no lo laves. Igual por dejar el protector del móvil para después, tampoco lo cambies. No lo sé, la verdad.
Pero igual después, termines por no llamar tampoco a tu amigo. Igual después, el café ya esté frío, la caña no tenga gas. Después, el encanto de todo se haya perdido. Después, temprano se convierte en tarde, después, los hijos crecen. Después, tu compañero ya no está. Después, la gente envejece. Después, el día se convierte en noche.
Después, pasa todo el 2025 y te das cuenta que no hiciste nada. No has vivido un año más, sino que has vuelto a malgastar otro. Tienes la opción de crear uno de los mejores años de tu vida. Solamente necesitas planificarlo bien y creer en ti. Haz tus objetivos y ve a por ellos.
Dejamos todo para después y hay veces que el después, es ir demasiado tarde.
Lo creas o no, después la vida se acaba. Tengo una amiga que me dijo en una ocasión:
" Las personas que murieron ayer, tenían planes para hoy."
A veces después es tarde, muy muy tarde. No dejes tu vida para después, porque eso, es hacer el KIKO.
Te deseo unos objetivos de nuevo año exageradamente motivantes.
Después no digas, que nadie te contó nada. Pero esto mejor, te lo cuento después. ¿Te parece?